lunes, 16 de enero de 2012

Evolución de la vida

Hace unos cuantos años ya (cómo pasa el tiempo), vi un documental en el que se planteaban posibles evoluciones para la vida en la Tierra. Normalmente, dedicados al fragor del día a día y a los asuntos "humanos", no alcanzamos a ver que la evolución sigue su camino, y que todas las especies, sin excepción, lo transitan. En el documental del que hablo se empleaba una buena dosis de imaginación, y aquí también puede hacerse ese ejercicio. ¿Qué animales y plantas poblarán nuestro mundo dentro de quinientos, mil, diez mil, cien mil o un millón de años? Realmente no hay límites para la imaginación, en combinación con los más sólidos fundamentos de la zoología, la botánica y la biología, entre otras ciencias.

La evolución que puedan tener las especies, tanto animales como vegetales, está en franca relación con el clima de cada momento geológico. Resulta evidente que las condiciones climáticas de cada lugar generan especies distintas, adaptadas, y cabe pensar, pues, que la evolución del clima pueda determinar, al menos en parte, qué características, qué aspecto, qué peculiaridades se manifiesten en las formas de vida del futuro. ¿Es posible una nueva era de los dinosaurios? ¿Se prolongará el triunfo de los mamíferos? ¿Cómo evolucionará la fisonomía del ser humano mismo? El cambio climático puede implicar, pues, cambios evolutivos, y solo poco a poco lo estamos comprendiendo. Qué grado de responsabilidad tendremos en la evolución de la vida es otra pregunta que, por ahora, queda abierta. Desde el optimismo, esperemos que aún haya deseos y capacidad para comprometerse con la Tierra.

Saludos de madrugada.

sábado, 7 de enero de 2012

Radiografía de la Tierra

La visión que tenemos de la Tierra ha cambiado considerablemente a lo largo de los siglos. De plana y centro del universo conocido, pasamos en su momento al mundo esférico que orbitaba en torno al Sol. Más tarde supimos que, de hecho, el sistema solar se mueve conjuntamente en torno al centro de una galaxia, la Vía Láctea. A día de hoy, los satélites nos brindan un profundo conocimiento de nuestro planeta, desde sus posiciones de observación más allá de la atmósfera. La informática, la electrónica, las nuevas tecnologías en general están llevando, casi sin que nos percatemos, a una nueva visión de la Tierra, hasta casi verla por dentro, cual radiografía. El mundo está cableado, redes como Internet conectan ordenadores de múltiples lugares, y podemos atisbar cómo es el interior del planeta, pueden medirse y detectarse seísmos, parametrizamos la meteorología, controlamos y vigilamos el tráfico y la seguridad, utilizamos teléfonos móviles que marcan posiciones, que podrían servir para mucho más de lo que siquiera podemos imaginar. De alguna manera, semejaría un organismo vivo, con sus arterias o sus nervios. ¿Adónde llegará la tecnología para cambiar nuestra visión de la Tierra y nuestras propias vidas?

Feliz año 2012.