miércoles, 31 de octubre de 2012

Vehículos inteligentes

¿Cómo serán los coches del futuro? Puestos a dejar volar la imaginación, caben muchos diseños y concepciones. Hay numerosas propuestas en libros, películas o series de ficción. Y en la realidad misma: formas aerodinámicas, tres ruedas en lugar de cuatro, híbridos, eléctricos... Se busca romper con la dependencia de los combustibles fósiles y a la vez dotar a los modelos de suficiente autonomía y velocidad. Pero también se trata de hacer prescindible al elemento humano. El conductor, tal y como lo conocemos hoy día, puede que no sea tan necesario como parece. Existen ya modelos, y no tan futuristas, que son capaces de estacionar solos, y otros, probados con buenos resultados, que, a través de distintos sistemas, circulan por sí mismos sin necesidad de conductor.

El debate puede estar abierto, aunque los cambios en la industria son lentos. También en la sociedad misma. Para algunos conducir es algo más que manejar una máquina. Para otros, es posible que la máquina por sí misma se maneje mejor, libre del potencial error humano que genera accidentes, tantos y tantos evitables. Claro, alguien tiene que poner en marcha la máquina... Aunque tal vez más pronto que tarde podamos ir un paso más allá, y programar los coches para que ellos solos arranquen y circulen. Y puede que lleguen a hablar, y "el coche fantástico" será una realidad.

Una vez más la tecnología es una puerta abierta para resolver retos y acercarnos a un verdadero bienestar, de la mano de la imaginación.

Saludos de madrugada.

viernes, 19 de octubre de 2012

Nebulosas

En la contemplación del universo, si dispusiéramos de unos buenos telescopios, o, incluso, en algún caso, sin ellos, tal vez aparecieran como los más hermosos objetos las nebulosas, concentraciones de gas y polvo donde acontece el nacimiento de las estrellas, o restos de estrellas extintas o en proceso de extinción. Aparecerían ante nuestros ojos de los más diversos colores y formas, y sus propios nombres son una evocación para la imaginación: la Cola de Caballo en Orión, Saco de Carbón en la Cruz del Sur, la del Águila en la constelación de la Serpiente, Trífida y de la Laguna en Sagitario, la del Anillo en Lira, Hélice y Cangrejo en Acuario. La nebulosa M42 o de Orión es la más cercana a la Tierra y observable a simple vista. Junto a ella otras como M78 y la nebulosa de la Flama. Todas ellas rivalizan en belleza, aunque cada uno podría tener su favorita por razones diversas. Y son objetos de sumo interés para la astronomía, por su origen y por lo que contienen o pueden contener, desde estrellas enanas blancas o púlsares a posibles planetas gaseosos, como en el caso de la nebulosa de la Flama. 

La composición de estas nubes de gas y polvo en sí misma ya justifica su estudio. Los elementos químicos que conocemos en la Tierra pueden provenir, y de hecho provienen, de las estrellas. ¿Qué aguarda por descubrir tras esos vaporosos tejidos de mil colores y hermosas conformaciones? ¿Algún nuevo elemento, o algo más sorprendente si cabe? La imaginación está abierta al descubrimiento.

Saludos de medianoche lluviosa.